Situada en Iparralde y muy cerca de la frontera, nos encontramos con Biarritz que podría considerarse como uno de los pueblos más pintorescas y elegantes de Euskal Herria.

Esto se debe, principalmente a que fue la ciudad favorita de la mujer de Napoleon, Eugenia y su zona preferida para su veraneo. La ciudad como tal no es muy grande pero tiene en su costa infinidad de playas para disfrutar los meses de verano. 

1. La Grande Plage 

Es la playa principal de la ciudad, está enclavada en la mitad de ella. Tiene un paseo enorme con un montón de bares y restaurantes perfectos para tomarte algo. En ella encontrarás al fondo el famoso Hotel du Palais y en su inicio el famoso Casino de Biarritz. 

En verano ponen un tienditas a rayas de colores, lo que le da un aspecto muy fotogénico. 

2. Plage de Miramar 

La segunda playa más importante de la ciudad es la que está detrás del Hotel du Palais y llega hasta el faro de Biarritz. Está más escondida que la Grande Plage por lo que es más tranquila. 

3. Plage du Port Vieux

La tercera playa de la ciudad de Biarritz es la llamada Plage du Port Vieux ideal para los días donde más sopla el viento. Es más pequeña que las otras, no hay grande oleaje por lo que es genial si viajar con niños. 

Está situada en medio de la ciudad siguiendo el paseo que inicia desde la Grande Plage pasando por les Roches. Aunque es una playa que suele haber bastante gente los meses de verano. 

Cuenta con un bar Eden Rock al borde del mar perfecto si encuentras sitio para disfrutar de una cervecita fresquita. 

4. Plage de la côte des Basque 

La cuarta y última playa de la ciudad de Biarritz es la más extensa de todas, tiene mucho espacio para tumbarse y es perfecta para hacer surf. 

A destacar sus preciosos atardeceres. 

5. Rocher de la Vierge 

Uno de los símbolos de Biarritz son las llamadas “Rocher”, salientes de roca en medio del mar y conectados con una pasarela que da una panorámica de la ciudad preciosa. 

La más famosa es la Rocher de la Vierge, más expuesta al mar da una panorámica perfecta de toda la costa de la ciudad, situada muy cerca del puerto viejo y es impresionante con el mar rompiendo a tus pies. 

6. Rocher du Basta 

Este segundo Rocher, está muy cerca de la Grande Plage, es más pequeño que el anterior aunque puedes subir hasta lo alto de él y disfrutar de una panorámica de toda la ciudad. 

Está menos expuesto al mar que la Rocher de la Vierge y el oleaje no es tan impresionante pero merece igualmente la pena cruzar. 

7. Eglise de Saint Eugenie 

La iglesia de St Eugenie, de estilo neogótico,  es otro de los iconos de la ciudad. Puedes entrar a verla de forma gratuita y cuenta con una cripta que alberga diferentes exposiciones de arte de la ciudad.

La Iglesia está situada en la plaza Saint Eugenie, un sitio muy animado lleno de bares y restaurantes muy cerquita del mar. 

8. Mercado de Biarritz; Les Halles. 

Construido por orden de Napoleon y hoy convertido en el corazón de la ciudad de Biarritz, el mercado de abastos Les Halles está repleto de gastronomía francesa en el que puedes encontrar quesos, foie gras, pimientos y hasta el famoso gateaux basque. 

Pero, no es solo un mercado al uso sino que cuenta con varios puestitos convertidos en restaurantes ideales para picar algo. 

Suele tener mucho ambiente principalmente al medio día y si visitas Biarritz en verano, no te pierdas el mercado nocturno los meses de julio y agosto. 

9. Hotel du Palais y Casino de Biarritz 

Tal y como os he comentado al inicio, la Grande Plage tiene dos edificios emblemáticos en sus esquinas: 

Casino de Biarritz: construido en 1929 y de estilo art deco es un edificio que merece la pena pararse a contemplarlo. Cuenta con un restaurante al borde del mar muy chulo. 

Hotel du Palais: si tu economía te lo permite, siempre te puedes alojar alli, pero si no, te aconsejo que te acerques a verlo. Es un imponente hotel de color rojo construido por Napoleon III para su mujer, Eugenie de Montijo. Hoy en día es un hotel de 5 estrellas sello de la conocida como Belle Epoque. 

10. Rue Mazagran y Rue Gambetta

Son las dos calles principales de la ciudad que la atraviesan de punta a punta. Están llenas de tiendas de ropa, joyerías, tiendas gourmet, creperías, heladerías, bares y restaurantes.

La calle Rue Mazagran más enfocada a las tienditas, cruza por la plage de Saint Eugenie y termina en la plage du port vieux y la Rue Gambetta con más ambiente de bares y restaurantes.   

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